Las mnemotecnias o mnemotécnicas son técnicas de memoria cuyo propósito es facilitar el aprendizaje y la memorización, orientadas a optimizar el proceso de adquisición, retención y recuperación de nuevos conocimientos.
Es un término que proviene de las palabras mnémon y tékhne, donde la primera significa “el que recuerda” y la segunda “arte” (de ahí el término “el arte de la memoria”). Dichas técnicas se remontan a la Grecia de los siglos V y VI antes de cristo (al menos hasta donde se tiene registro, quizás son previas), período durante el cual numerosos oradores, filósofos y poetas las usaban para declamar extensos discursos, narrativas o canciones.
Se cree, de hecho, que las mnemotecnias fueron claves detrás del traspaso del conocimiento de generación en generación, muchísimo antes de la invención de la imprenta. Estas técnicas para la memoria son comúnmente utilizadas para lograr un mejor dominio a nivel profesional o académico, y también para los estudios de postgrado y pregrado, así como para preparar exámenes, oposiciones y exposiciones.También son útiles para actividades de la vida cotidiana. Por ejemplo, pueden ayudarnos a memorizar libros, nombres de personas, mazos de cartas al azar, direcciones exactas, horarios y citas, listas extensas, números telefónicos y mucho más.
¿En qué consisten las mnemotecnias?
Las mnemotécnicas se forman a partir de la asociación o vinculación de los temas a memorizar con ideas, objetos, personajes o elementos que ya conocemos. Este último principio es la base de toda la memorización efectiva, y podemos resumirlo en la siguiente ecuación:
MCL + MLP = MMP
Esto quiere decir que cuando juntas una memoria a corto plazo (lo que quieres retener) con una memoria a largo plazo (algo que ya conoces), puedes crear una memoria a mediano plazo más intensa.
Las mnemotecnias son muy útiles, gracias a que funcionan como puentes para aumentar las probabilidades -a veces de forma considerable- de recordar algo. Lo ideal es que la mnemotecnia cumpla con tres reglas: ser sorpresiva o absurda, sustituir lo difícil de memorizar por algo fácil de visualizar (imagen), y que dicha imagen sea lo más dinámica posible (es decir, que contenga movimiento).Elegimos las imágenes porque, en palabras del autor Alain Lieury, codificar con imágenes hace mucho más fácil el recordar. Además, nos permiten despertar emociones y sensaciones que las hacen notables para nuestra mente. Sin embargo, también es posible codificar verbalmente, a través de la integración o clasificación entre palabras por fonética, semántica u otras.
Ejemplos de mnemotecnias para facilitar tu vida
Las combinaciones de información pueden establecerse de diferentes formas, ya sea por su fonética, su semántica, su categoría, entre otras. No obstante, esta asociación, aunque absurda o creativa, debe ser coherente en su esencia; solo de esta forma nuestra mente será capaz de evocarlo.Estas son algunas de las mnemotécnicas más utilizadas:
Asociaciones mentales
Las asociaciones mentales son imágenes que creamos en la mente cuyo propósito es facilitar la codificación de un concepto y su posterior recuperación.
La decodificación de asociaciones mentales hace uso del principio del active recall (“traer a la memoria”), de manera que no solo sirven para memorizar propiamente tal, sino que además abren la puerta a fortalecer el aprendizaje en sí.
Estos son algunos ejemplos de asociaciones mentales:
- Si queremos recordar que un artículo legal habla sobre las definiciones de una ley, podemos asociar definición por TV de Alta Definición (asociación por palabra idéntica).
- Si queremos recordar la definición médica de migraña, podemos pensar en una araña con dolor de cabeza, pues es más fácil de imaginar una araña que migraña a secas (asociación por rima).
- Para memorizar la palabra focalizar en un poema, podemos pensar en foca (asociación por letras iniciales).
Hay muchos tipos de asociaciones mentales, los que en general toman como referencia una similitud fonética.
Acrósticos
Esta técnica se basa en la creación de una sencilla composición verbal a partir de las palabras o conceptos que necesitamos memorizar. Por ejemplo, si el tema de estudio son las partes del corazón (Aorta, vena Cava superior, Aurícula izquierda, Aurícula derecha, Ventrículo derecho y Ventrículo izquierdo) entonces nuestro acróstico sería ACAAVV.
Asociación alfanumérica
Es muy útil para memorizar números. Si, por ejemplo, necesitamos recordar dígitos muy largos (como el valor del número pi), fechas históricas o algún teléfono, debemos asociar cada número unitario (es decir, del 0 al 9) con una letra. Por ejemplo, la mitad del 0 se parece a una C, así que 0 = C. El 1 se parece a la L (especialmente a la minúscula), de modo que 1 = L. Así, podemos inventar asociaciones visuales para todos los dígitos del 0 al 9:- 0 = C
- 1 = L
- 2 = N
- 3 = M
- 4 = R
- 5 = S
- 6 = G
- 7 = T
- 8 = B
- 9 = P
Este grupo de asociaciones visuales se conoce como el sistema número-letra. También se le llama Sistema Mayor, aunque este último emplea asociaciones comúnmente relacionadas con el uso de las consonantes en inglés, no en español.
Por eso, la recomendación para hispanohablantes es utilizar las asociaciones arriba mencionadas.
Ejemplos de mnemotecnias alfanuméricas
Si quieres memorizar que determinado medicamento requiere de 50 mL para cierto grupo etario, puedes pensar en 5 = S, 0 = C, es decir en un SaCo (de harina). Este sistema garantiza que, al decodificar la mnemotecnia (el saco, en este caso), puedas decir con absoluta exactitud el número en cuestión.
Si tuvieras que recordar que el artículo 43 del Código Civil establece que «son representantes legales de una persona uno o ambos progenitores, el adoptante y su tutor o curador», tendrías que pensar en RaMón (Don Ramón) abrazando a la Chilindrina (como que fuera su representante legal). Luego, solo restaría decodificar cuando se te pregunte por el 43: «R…M… RAM, REM, RIM, ¡RAM! Ramón… ¿Abrazando a la Chilindrina? ¡Ah, es el artículo de los representantes legales!».
Esta técnica sirve en general para leyes, artículos, fechas históricas, constantes científicas, elementos, listados, posologías, y mucho más.
Historias breves
Esta mnemotecnia se basa en crear una breve historia utilizando asociaciones mentales, de modo que la decodificación de esta historia resultaría en un concepto (o en un listado de conceptos) más completo, en comparación con emplear una sola asociación mental.
Si, por ejemplo, queremos recordar las partes de una neurona, podemos hacer lo siguiente: asociamos DENdrita con DENtista (equivalencia de primeras letras), Soma con Sumo (mismas consonantes), axón con Axl Rose (relación fonética) y terminal sináptico con TERMo (equivalencia de primeras letras).
Luego, debes complementar estas asociaciones con la creación de una historia absurda: un DENTISTA haciendo una pelea de SUMO con AXL Rose, mientras beben de un TERMO.
Palacio de la memoria
También conocido como método loci, es una de las técnicas para la memoria indispensables. El palacio de la memoria busca fortalecer la retentiva de los tópicos o temas a memorizar por medio de asociaciones mentales ubicadas dentro de un lugar familiar para nosotros, valiéndonos solo de la imaginación.
Para comenzar, hay que detectar las estaciones de la casa que sean más intuitivas, por ejemplo, la cama, una repisa, el clóset o una lámpara, y luego ubicar por medio de la imaginación una asociación mental que nos recuerde al concepto.Si necesitamos recordar comprar botellas de agua en el supermercado, podemos imaginar una gran botella de agua en la entrada de nuestra casa (la entrada sería la estación). Lo importante es hacer el recorrido con nuestra mente y depositar en cada sitio una asociación mental.
Cuando la técnica del palacio mental se implementa de forma metodológica y se combina con la técnica de las historias bebes -y en especial cuando estas son historias absurdas-, entonces es mucho más probable lograr proezas de memoria extraordinarias.
Las mnemotécnicas son estrategias que nos ayudan a memorizar considerablemente más rápido, retener por mucho más tiempo, y evitando usar la repetición insistente como única forma de aprender (que, de hecho, es la peor forma de memorizar).
¿Y tú, cuándo comienzas a implementar estas técnicas?
